¿Por qué un retiro?

Porque el estilo de vida contemporáneo suele ir a un ritmo demasiado rápido para nuestro cuerpo, corazón y mente. La mayoría de nosotros se beneficia de unos cuantos días con un horario más laxo, un ambiente tranquilo y un entorno que permite que nos pongamos al día con nosotros/as mismos/as.

La meditación y el yoga nos pueden ayudar en esto. La experiencia del yoga nos aparta de la mente pensante y nos ayuda a poner atención a nuestro cuerpo. El cuerpo se hace menos pesado y, así, también lo hace la mente. Al añadir meditación a esta mezcla, nuestra mente descubre que puede también reponerse sin necesidad de obsesionarse con pensar. Todo esto nos da un centro equilibrado, un silencio beneficioso.

Le damos a nuestro cerebro un tiempo de descanso y creamos conciencia acerca de nuestro cuerpo, nuestra respiración y de nuestro eje emocional. Comenzamos a escuchar los indicios más silenciosos de nuestra habilidad de reflexionar. Es lo que en el budismo llaman sabiduría, mientras que en occidente lo tildamos más bien de intuición. No puedo pensar en ninguna otra cosa que el mundo necesite más en este momento.

Si este proceso te suena muy idílico, es importante que sepas que no siempre es así. Cuando nos apuntamos a un retiro, no volvemos como hojas en blanco. Arrastramos con nosotros parte de lo que se ha ido y ese equipaje no siempre es sencillo ni ligero. Una vez en el retiro, nuestra conciencia se agudiza, mientras nos relajamos en medio del silencio y gracias al apoyo de personas que tienen el mismo fin y esto lleva a que nuestra capacidad de sentir se potencie. Es en este momento que aquello que necesita nuestra atención, se hace más visible. Solo necesitamos volvernos conscientes de aquello, sin juzgar, analizar o desear que desaparezca. Paradójicamente, ese tipo de atención es justamente lo que nuestra memoria necesita entender y evaporar.

Luego, por su puesto, se completa con largos y placenteros estiramientos. Mientras nos volvemos más presentes en el retiro, disfrutamos también de la espectacular cocina vegana de Cal Reiet. Comenzamos a percibir de una forma más intensa de la belleza de la naturaleza y de aquellas cosas creadas por el hombre. Suavizamos nuestra conducta y conectamos mucho más con las personas de nuestro alrededor. Y así, una vez terminado el retiro, volvemos a nuestras vidas con un sentimiento de valentía, confianza y gratitud.

 

Björn Natthiko Lindeblad tiene un MBA de la Stockholm School of Economics y pasó 16 años como monje budista en la Thai Forest Tradition. Desde que regresó a la vida moderna en 2008, comenzó a dar charlas y clases de meditación en Suecia y en el extranjero. Tiene su propio podcast, programa de radio y trabaja frecuentemente en la televisión sueca.

Petra Bensland es la responsable de las clases de yoga durante el retiro en Cal Reiet. Nacida en Suiza, co-creadora de Yoga Elements Zürichsee y Cal Reiet Holistic Retreat, Mallorca, vive en Herrilberg, Suiza con su familia de tres adolescentes.

Petra es profesora certificada de 500h RYT en tradición clásica del yoga. Su foco durante las prácticas de yoga es la respiración, alineación del cuerpo y mindfulness. Sus clases ‘early bird’ y las de por las tardes, prepararán tu cuerpo, mente y espíritu para la conversación Dharma y meditación con Björn (no hace falta tener experiencia en yoga).